A pesar de las situaciones conflictivas que se extienden a lo largo y ancho del mundo, cuando llega la Navidad el optimismo y la esperanza, y valores como la generosidad, la solidaridad y la paz, se apoderan de todos nosotros. Por eso es importante hablar de la Navidad a nuestros niños, niñas y jóvenes, enseñándoles su verdadero sentido y valor; y la mejor forma es con la representación de un Belén Viviente. El Belén Viviente de Juan Soñador, nos enseñó como un grupo de pastores (Educadores) desde su humildad y amor fueron dirigidos por un Ángel al portal de Belén, al que todos los niños, niñas y jóvenes de Juan Soñador asistieron y encontraron al Niño en un pesebre, para así convertirse en sembradores de estrellas que quieren y sueñan un mundo mejor, llevando cada uno en sus manos un mensaje de amor.